CAZAUBON

En el recodo de estas calles medievales, se pueden descubrir las murallas, que son las más antiguas del pueblo, la rue de la Brèche es la Porte d’Uzan, a veces apodada «la puerta de la sangre».

La vista, en un día claro, permite vislumbrar el horizonte de los Pirineos. Uno puede imaginar que el paisaje ha permanecido igual desde la Edad Media. Vista desde el valle, la ciudad es impresionante y parece inexpugnable.

El Hospicio (actual Maison des associations) se extendía sobre la Porte d’Uzan. Su arquitectura es típica del siglo XII con sus vigas y ménsulas vistas. Este establecimiento desempeñaba un papel importante en la organización de la ciudad, acogiendo a los peregrinos de paso, así como a los enfermos y necesitados. Una vocación social que continúa hoy en día con la presencia de la Cruz Roja y del Secours Catholique.

¡Es el lugar perfecto para una foto de recuerdo!

La iglesia de Uzan.

Esta majestuosa iglesia es el símbolo de la evolución de la ciudad de Cazaubon.

Construida en el siglo XIX en estilo neogótico, fue edificada a instancias del abate Ducru. La ambición de la iglesia era acoger a un mayor número de feligreses, pero también mostrar la riqueza de la ciudad.

Su alta y estricta fachada, de piedra maciza, le confiere un aspecto monumental.

Dentro, descubra su rico mobiliario y sus luminosas vidrieras que representan a los santos de la Biblia.

¡Trate de reconocerlos!

La antigua iglesia de Cazaubon data de la Edad Media.

Situada en el corazón histórico de Cazaubon, la ciudad se organizó en torno a este lugar de reunión. El interior del edificio muestra magníficas bóvedas de crucería y ventanas góticas con curvas elaboradas.

Hoy en día, esta iglesia es un lugar cultural donde se celebran exposiciones.

¡Venga y pregunte por el programa en la Oficina de Turismo!